El cambio climático beneficia a los vinos
Hace una década, la vitivinicultura era vista como una proposición perdedora en estos climas frescos. Pero conforme aumentan las temperaturas, una industria vinícola en ciernes está creciendo en toda Escandinavia.
- Liz Alderman
- - Actualizado: 26/12/2019 - 04:45 pm
SKAERSOGAARD, Dinamarca — Una templada mañana de otoño, Sven Moesgaard inspeccionó una extensión de vides cuidadosamente sembradas. Una cuadrilla cosechaba toneladas de uvas Solaris que Moesgaard convertiría en miles de botellas de vino blanco y espumoso danés.
Hace una década, la vitivinicultura era vista como una proposición perdedora en estos climas frescos. Pero conforme aumentan las temperaturas, una industria vinícola en ciernes está creciendo en toda Escandinavia, al tiempo que los emprendedores buscan convertir el clima en calentamiento en un beneficio.
“Estamos buscando las oportunidades en el cambio climático”, dijo Moesgaard, fundador de Skaersogaard Vin. “En las próximas décadas, estaremos produciendo más vino en Escandinavia mientras que los países que tradicionalmente han dominado la industria producen menos”.
Dinamarca ahora presume 90 viñedos comerciales, comparado con sólo dos hace 15 años, y unos 40 han surgido en Suecia. Casi una docena opera tan al norte como Noruega. Pero muchos están en la etapa de arranque y son minúsculos comparados con los viñedos establecidos en Europa, que tiene 4 millones de hectáreas de viñedos. Los productores en Francia, Italia y España poseen tres cuartos de esa tierra.
INTERESANTE: ¿Qué haría Jesús en la era actual?
Pero se pronostica que dentro de 50 años, el clima de Escandinavia será más como el del norte de Francia, a medida que se eleven las temperaturas hasta 6 grados centígrados. En la última década, el calentamiento ha producido inviernos más templados, una temporada de cultivo más larga y un número creciente de vinos galardonados.
Los vinateros nórdicos se animan a invertir al ver que los productores de vino del sur de Europa batallan.
Los climatólogos afirman que el mapa global del vino podría transformarse para el 2050. Los países productores dominantes en Europa y Latinoamérica, junto con partes de California y Australia, podrían calentarse demasiado, mientras que áreas no tradicionalmente conocidas por la vitivinicultura despegan.
“Estamos tratando de definir el estilo del vino nórdico”, expresó Tom Christensen, que fundó Dyrehoj Vingaard, la compañía de vinos más grande de Dinamarca, hace una década con su hermana. Eso incluye invertir en variedades de uva con una calidad acídica y fresca y una producción orgánica. La empresa produce 50 mil botellas de vinos blancos y espumosos de primera calidad, y Christensen planea expandirse.
LEA TAMBIÉN: Norcorea desarrolla su turismo
La cantidad de vino nórdico producido sigue siendo pequeña, y la mayor parte se consume dentro de la región, dejando poco para la exportación. Los ingresos del vino en Dinamarca, Noruega y Suecia fueron de unos 14 millones de euros (unos 15.6 millones de dólares) este año, comparado con 28 mil millones de euros en Francia. Se tendrá que producir más vino para que la industria sea sostenible, dijo Odd Wollberg, un vitivinicultor en Noruega. El año pasado, asumió el mando de Lerkekasa Vingard, alguna vez considerado el viñedo más norteño de Europa.
Sin embargo, el precio debe bajar para atraer a los consumidores. Las botellas nórdicas promedian de 30 a 40 euros (33 a 44 dólares) debido a los costos de la mano de obra que son tres veces mayores que los de Francia, Italia y España. Los vitivinicultores sureños también reciben miles de millones de euros en subsidios. Algunos expertos señalan que la calidad aún no justifica el costo.
Los vinateros nórdicos apuntan al sur de Inglaterra, donde ha emergido una industria de vino espumoso de clase mundial. Algunas compañías, incluyendo Taittinger de Francia, han invertido en tierras en Gran Bretaña para minimizar los riesgos de abruptos aumentos de temperatura en Champaña.
LEA: El stand-up se propaga en Vietman
Moesgaard cree que las casas de vino extranjeras algún día harán lo mismo en Dinamarca. Su etiqueta Don’s ganó gran aprobación en festivales alemanes y franceses.
“Vamos a producir vino donde no era posible antes”, afirmó. “Nadie puede decir que está feliz con el cambio climático. Pero deberíamos sacar provecho de las oportunidades que trae”.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.